Con los decretos de Emergencia Social, el gobierno busca darles el golpe de gracia a las instituciones públicas prestadoras del servicio de salud, para facilitar un control completo por parte de las EPS.
El país requiere un sistema de salud que cubra a toda la población, pero que de veras la proteja y que le atienda las diferentes enfermedades y no se convierta en lucro.
Creo que es hora de que el médico colombiano se baje del pedestal de creerse inmune a la crisis integral del sistema de salud y deje de refugiarse en argumentos meramente académicos o de apostolado y asuma el liderazgo perdido en todos estos años.
La indignación motivada por los criminales decretos de Emergencia Social firmados por Uribe comenzó a expresarse en las calles el pasado 6 de febrero. Con nutridas marchas convocadas por la red social Facebook en internet, miles de ciudadanos, en las principales capitales, exigieron la derogatoria inmediata de las nefastas normas.
Por Alfonso Hernández
Suele decirse que la confianza mata, y a Álvaro Uribe, el imbatible en las encuestas de opinión, un error garrafal de cálculo lo tiene bastante maltrecho. En medio de su trapicheo reeleccionista decidió colmar los apetitos de los dueños de las EPS, procediendo de manera inmisericorde a imponer a los colombianos el pago de sumas exorbitantes por la atención en salud que no esté incluida en el POS, a restringir éste aún más y a escarmentar a los médicos que osen dar prioridad a la salud de los pacientes sobre las cuentas avaras del “costo beneficio”.
Presentamos lo que dicen el presidente Álvaro Uribe y el ministro de la Protección Social, Diego Palacio, acerca de dos de los asuntos más polémicos de los recientes decretos de Emergencia Social promulgados por el gobierno: la desmejora de los servicios y el pago con las cesantías, las pensiones o hipotecándose con los bancos, de las llamadas prestaciones excepcionales. A la vez, presentamos el texto de lo que dicen los decretos para que el lector vea cómo se le miente olímpicamente al país.
Colaboración para Notas Obreras de Camilo Hernández M.D.
Con la utilización de la Emergencia Social para tratar la crisis de la salud, el gobierno busca ocultar las verdaderas raíces de un problema que lleva 16 años, desde la expedición de la Ley 100, y tomar unas medidas que lejos de resolver el problema lo van a profundizar. Con demagogia pretende hacerle creer al país que su afán es nivelar el POS subsidiado (Sisben) con el contributivo, mientras esconde sus verdaderas intenciones de favorecer aún más a sus aliados monopólicos de las EPS.
Enero 29 de 2010
La Academia Nacional de Medicina de Colombia expresa su profunda preocupación con motivo de los decretos-ley que han sido expedidos en el marco de la Emergencia Social decretada por el Gobierno y cree que, en conjunto, tales decretos representan un grave atentado contra la medicina como ciencia y profesión, atentado que nunca se había registrado en esta ni en ninguna otra nación democrática.
El plenun de la asociación colombiana de sociedades científicas conformado por las organizaciones científico gremiales de especialidades y subespecialidades en sesión extraordinaria reunida en la ciudad de Bogotá reunida el 29 de enero del corriente, tras el logro de consenso se permiten informar a la opinión pública.
Decreto 120: Por el cual se adoptan medidas en relación con el consumo de alcohol. Decreto 126: Por el cual se dictan disposiciones en materia de Inspección, Vigilancia y Control. de lucha contra la corrupción en el Sistema General de Seguridad Social en Salud, se adoptan medidas disciplinarias, penales y se dictan otras disposiciones. Decreto […]