Los educadores debemos tomar estas agrias lecciones que nos deja ese examen del 25 de septiembre para revolucionar la educación en los colegios públicos. Que nuestra misión fundamental sea llevarles el conocimiento a los hijos de los humildes, a quienes las clases dominantes les han venido negando la educación que vale la pena.
Yo también voté en blanco porque considero necesario enfrentar y derrotar al Gobierno de Santos y a los Gobiernos regionales que privatizan la educación pública. Yo también Voté en Blanco porque se agravan las condiciones laborales del gremio, pues se pretende aumentar la jornada laboral a 8 horas, destruir la estabilidad laboral con la evaluación […]
El comité de maestros de base, al igual que miles de maestros también llamó a votar en BLANCO en las elecciones sindicales del 7 de junio. Hastiados por los acuerdos entre el Gobierno y las centrales obreras, las federaciones de trabajadores estatales, entre ellas la FECODE decidimos protestar. Estos acuerdos, en donde se evidencia de […]
El pasado mes de mayo se frustró la aspiración del magisterio colombiano de reivindicar sus derechos.
Ante la imposibilidad de una respuesta satisfactoria por parte de algunos integrantes de la junta directiva de SIMANA (Sindicato del Magisterio de Nariño), referente a las negociaciones y acuerdos entre FECODE y el gobierno nacional, representado por la ministra de educación nacional, me permito formular publica y abiertamente un par de inquietudes que permitan dilucidar […]
La lucha contra el recorte a las transferencias Por Francisco Cabrera Cuando la Junta Nacional de Fecode, realizada el 1° de junio, decidió de manera sorpresiva levantar el paro nacional indefinido sepultó la posibilidad de impedir el nuevo recorte a las transferencias y de propinarle una derrota al gobierno de Uribe. Las condiciones eran altamente […]
Por Alejandro Torres[*]
El episodio de la reforma constitucional mediante la cual se redujeron las transferencias de recursos de los ingresos corrientes de la nación a los departamentos y municipios, destinados a los gastos de salud y educación, dividió el país en dos bandos claramente definidos: de un lado, el pueblo que rechazaba la abrupta merma de los ya insuficientes fondos, y del otro, la cúspide oligárquica empecinada en «honrar», sin más dilaciones, su «pacto» de diciembre de 1999 con el Fondo Monetario Internacional.