Es imperativo en este momento para cualquier demócrata, para cualquier persona o Partido que se precie de progresista, para cualquier sindicato, que defienda los intereses de los obreros y del pueblo, es rechazar sin ambages esta infame agresión. Notas Obreras condena el complot imperialista contra el pueblo y el gobierno venezolanos.
La Revolución Rusa es un hecho histórico que dejó lecciones importantes para la construcción de una sociedad completamente nueva, la sociedad socialista.
Este siete de noviembre (25 de octubre en el antiguo calendario) se celebra el centenario de la Revolución Bolchevique, en la cual los obreros, campesinos y soldados tomaron el poder en Rusia y, por primera vez en la historia, lograron consolidar un Estado bajo su mando y producir cambios profundos en la sociedad, de modo que los humildes tuvieron la primacía y les pusieron coto a los abusos de los magnates.
En los meses previos a los gloriosos acontecimientos de octubre de 1917, cuando la clase obrera erigió el socialismo por primera vez en un país, Rusia, el más vasto de la tierra, el magnífico líder de este proceso, Vladimir Ilich Ulianov, Lenin, señaló varios factores que habían hecho posible el derrocamiento de la centenaria satrapía zarista, el establecimiento de un gobierno provisional de la burguesía y de un Soviet (Asamblea) de diputados obreros y soldados en San Petersburgo, hechos que dieron comienzo a la revolución y que acaecieron en febrero de ese año.
Marcha del 22 de enero de 1905, día conocido como el domingo sangriento
El 25 de octubre de 2017, de acuerdo con el calendario juliano (7 de noviembre, calendario gregoriano, de uso actual), el mundo celebra el Centenario de la Revolución Rusa, que fue, sin duda, no sólo el hecho más importante del siglo XX, sino que tiene una gran trascendencia histórica para la humanidad.
Muñeco que repite las frases célebres del magnate en el programa El Aprendíz. Tomado de bbc.com
La escritora Svetlana Alexiévich, premio Nobel de Literatura de 2015, sostiene que la Revolución Rusa se propuso crear el hombre nuevo, y lo logró, con lo que se originó lo que ella denomina, con ironía, el Homo sovieticus; así, tituló uno de sus libros El fin del “Homo sovieticus” (Alexiévich, 2015), en el que pretende caracterizar a esta “especie”, que a nuestro juicio —y siguiendo el estilo clasificatorio de Alexiévich—, es resultado de la evolución de un alto grado de conciencia del Homo laboriosus.
De la carátula del libro TrumpNation: The Art of Being the Donald, de Timothy OBrien
Las castas dominantes enfrentan crecientes dificultades para imponer en las urnas sus cuadros y sus orientaciones. Las medidas globalizantes —encaminadas a ensanchar el mercado a los oligopolios para evitar la depresión crónica de la economía, consolidar el dominio imperial y obstruir el paso a potencias advenedizas— levantan una resistencia poderosa de la población que se siente vapuleada y que ofrece, por lo pronto, su respaldo a la derecha estrambótica.
En horas de la tarde del 5 de marzo murió en Caracas el presidente de Venezuela Hugo Chávez Frías, después de una prolongada enfermedad.
Las turbulencias de la crisis económica en España y en el conjunto del viejo continente auguran un nuevo auge de la lucha de las masas, en una región del globo que vuelve a jugar un papel decisivo para la humanidad.